Ni los masones son iluminatis, ni los rosacruces son masones, ni otras sociedades discretas o secretas tienen vínculos en común. Pero la creciente conspiranoia sobre estas sociedades en Internet las considera por un igual, creando tal confusión entre los profanos, que es difícil convencer a un recién llegado a estos temas sobre lo que es una cosa u otra.
Vamos a poner un poco de orden y concierto entre tanta organización.
Masones
Los albañiles constructores de grandes catedrales llegaban al sitio de la obra, a menudo de diferentes países y de diferentes lugares del país. Lo primero que edificaban era la Logia, taller donde iban a vivir durante años, guardar las herramientas, formar a sus aprendices, transmitir sus instrucciones y sus técnicas gremiales en un ambiente cerrado a las personas que no habían sido admitidas tras pasar por una ceremonia de iniciación en la que debían jurar fidelidad para que esos conocimientos no salieran del circulo de la construcción.
Los albañiles constructores de grandes catedrales llegaban al sitio de la obra, a menudo de diferentes países y de diferentes lugares del país. Lo primero que edificaban era la Logia, taller donde iban a vivir durante años, guardar las herramientas, formar a sus aprendices, transmitir sus instrucciones y sus técnicas gremiales en un ambiente cerrado a las personas que no habían sido admitidas tras pasar por una ceremonia de iniciación en la que debían jurar fidelidad para que esos conocimientos no salieran del circulo de la construcción.
Las logias eran escuelas profesionales y técnicas donde se enseñaba cálculo, geometría, física, a leer los planos, etc., cuando la mayoría de la gente era analfabeta.
Ahí podían hablar libremente entre hermanos de cofradía gremial sin reparos, todos pertenecían al gremio de los constructores. Las grandes obras arquitectónicas que se desarrollaban durante años requerían una organización precisa y reglamentada que establecía una rígida jerarquía de subordinaciones. Debido a ello los albañiles constituían un gremio perfectamente organizado y muy exclusivo en el que la experiencia de cada uno determinaba los conocimientos a los que podía aspirar.
Existía un maestro albañil que dirigía las logias. En cada logia trabajaba una docena de albañiles o masones de diferentes categorías: maestros, compañeros y aprendices.
La admisión en el gremio exigía haber nacido libre y ser de buenas costumbres. En su rito de iniciación, el aprendiz recibía un signo de honor con el que debía marcar todas sus obras: los signos lapidarios. Esto duro hasta el siglo XVI.
Después de la masonería operativa (constructiva) llegaron los masones adoptados. Abarca el siglo XVII y principios del XVIII. Es un periodo de transición en el que las sociedades masónicas fueron admitiendo miembros honoríficos, llamados “aceptados”, cuyas profesiones eran diferentes a las propias de la construcción.
La decadencia de las técnicas de cantería mediante el ensamblaje de piedras y la generalización de otras técnicas de construcción más sencillas, supuso la paulatina desaparición de las logias de cantería, Así, algunas logias fueron aceptando a miembros profanos hasta ver a todos sus miembros sustituidos por masones desvinculados de la actividad constructiva.
La pertenencia a este tipo de logias tuvo una gran aceptación por la necesidad de muchas personas de disponer de un lugar de reflexión libre de dogmatismos y de restricciones.
Cada vez era mayor el número de esos asimilados, mientras el elemento operativo fue paulatinamente eliminado, y poco a poco los aspectos meramente técnicos de la masonería operativa se convirtieron en algo anacrónico.
En 1717 es cuando aparece la masonería especulativa, que es la fecha que se considera de inicio, ya que el 24 de Junio es cuando en Londres se formó la Gran Logia de Inglaterra para compactar cuatro logias de miembros exclusivamente profanos. Para dotarse de un cuerpo de derecho encargaron inmediatamente la redacción de unas constituciones a dos pastores protestantes: James Anderson y Teofilo Desaguliers. En 1723 fue publicada la primera edición de lo que será conocido como las Constituciones de Anderson, y se convirtió en la carta magna de la masonería universal hasta nuestros días.
Este documento es el eslabón simbólico entre la masonería operativa de los antiguos albañiles y canteros y la masonería especulativa, que ahora pasaría a ser talleres de arquitectura interior de las personas. Es el documento más relevante de la Masonería, ya que ordena, organiza, estructura y reglamenta la Masonería.
Los masones se reconocían como hermanos y defendían la igualdad de todos los miembros. Por medio de la tolerancia, la fraternidad y la libertad intentaban acotar los desmanes de su época, protagonizados por los fanatismos y guerras de religión.
Dado que existen 200 ritos masónicos diferentes en todo el mundo, con diferencias entre los llamados regulares e irregulares, prescindimos de incluir ninguna referencia web en esta ocasión.
Rosacruces
La fraternidad de los Rosacruces es mundialmente conocida como la antigua Orden Mística de la Rosa Cruz. Su símbolo: una cruz con una sencilla rosa en el centro.
Los Rosacruces se auto definen de la siguiente manera:
“Los rosacruces son una Orden Fraternal. Son un grupo de hombres y mujeres progresistas, interesados en agotar las posibilidades de la vida, mediante el uso sano y sensato de su herencia de conocimientos esotéricos y de las facultades que poseen como seres humanos. Estos conocimientos, que ellos fomentan y enriquecen con nuevos hallazgos, abarcan todo el campo de los esfuerzos humanos y todo fenómeno del universo conocido por el hombre”. El Dominio de la Vida, (publicación oficial), pág. 16.
En la Enciclopedia Británica se encuentra el artículo Rossicrucianism, escrito por H. Spenser Lewis quien era el “Imperator ad vitam” y el ideólogo más acreditado de este movimiento:
“El rosacrucismo es un sistema de filosofía mística cuyo fin es el de guiar el desarrollo de la conciencia interna. La opinión popular atribuye su fundación, ocurrida en Cassel, Alemania, en el siglo XVI, a la publicación de unos folletos titulados: ‘Allgemien und general Reformation der gazen weiten Welt’ y ‘Fama Fraternitatis’, atribuidos al teólogo Valentín Andrea (1586-1654)”.
Los rosacruces, en sus publicaciones, reclaman que sus orígenes se remontan a las escuelas de misterios, de conocimientos secretos, del antiguo Egipto establecidas durante el reinado de Tutmosis III, hacia el 1500 a.C Su sucesor Amenhotep IV, jefe también de las escuelas de misterios, y que “abolió el politeísmo”, es considerado por los rosacruces como su tradicional Gran Maestro… De Egipto, dicen ellos. La Hermandad se extendió a Grecia y Roma. Después, durante la Edad Media, las misteriosas enseñanzas rosacruces vivieron en clandestinidad, soterradas bajo diversidad de nombres esotéricos. Se fue transmitiendo secretamente hasta su estructuración en el siglo XVII.
El mismo H. Spenser Lewis sólo aseguraba que los textos más antiguos hacen remontar el movimiento Rosacruz al 1410. Sin embargo, la crítica histórica hace ver que La Fraternidad Rosacruz no llega más allá de 1614, cuando un teólogo luterano llamado Juan Valentín Andrea publicó en Cassel, Alemania, el folleto titulado ” Fama Fraternatis Rosa Crucis”. En el folleto se cuenta la historia de un noble alemán, Christian Rossecreuz (1378-1484), personaje de leyenda sin base histórica, que en sus viajes al Oriente se inició en los misterios de la magia que mezcló con doctrinas cristianas, fundando la Hermandad Rosacruz en 1408. Andrea se presentaba como heredero de sus secretos que ofrecía al público en su obra. La Rosa y la Cruz eran parte del escudo de la familia Andrea.
El folleto tuvo éxito en un mundo hambriento de misterio y esoterismo, y el mismo Andrea, cuando quiso detener la avalancha que había desencadenado, no lo pudo lograr. El Rosacrucismo se funda, pues, en las enseñanzas de Andrea.
Hoy en día varias organizaciones reclaman para sí la primitiva herencia rosacruz. La más importante, “La Antigua y Mística Orden Rosae Crucis”, abreviado AMORC tiene su centro en el parque Rosacruz de San José California.
Este es un resumen de los cinco manifiestos rosacruces, publicados hasta la fecha.
La Fama Fraternitatis (1614)
Se destina a los dirigentes políticos y religiosos y científicos de la época. Se expresa de manera más bien negativa sobre la situación general en Europa. Bosqueja el pasado de la Orden Rosacruz, por lo que se refiere a Alemania y revela la existencia de la Orden Rosacruz a través de la historia alegórica de Christian R. desde el periplo que llevó a cabo por el mundo. Es importante mencionar que el nombre simbólico de Christian Rosenkreutz fue usado por diversos responsables de la Orden durante siglos y no solamente por el personaje mencionado en “La Fama Fraternitatis”.
La Confessio Fraternitatis (1615)
El segundo Manifiesto rosacruz “La Confessio Fraternitatis” completa el primer Manifiesto, por una parte insistiendo sobre la necesidad para el Hombre y la sociedad de regenerarse, y por otra indicando que la Fraternidad Rosacruz posee una ciencia filosófica que permite operar esa regeneración. Para ello, se dirige principalmente a los que buscan con el deseo de participar en los trabajos de la Orden y trabajar para la felicidad de la Humanidad.
Las Bodas Químicas de Christian Rosenkreutz (1616)
El tercer Manifiesto rosacruz es muy diferente de los dos precedentes. He aquí a grandes rasgos su propósito. En este texto, Christian Rosenkreutz es un anciano de ochenta y un años, que narra su propia aventura. Se trata del relato de siete jornadas y donde el asiste a las nupcias reales. En 1454, invitado por una mensajera alada, deja su recogimiento en el flanco de la montaña para ir a este matrimonio. Después de varios periplos, llega a la cima de una alta montaña, antes de franquear tres cinturones sucesivos. Ahí, como los otros invitados, es sometido a la prueba de la balanza y juzgado como muy virtuosos para participar en el matrimonio. Los elegidos reciben un Vellocino de oro y son presentados a la familia real.
Se espera asistir a un matrimonio, pero lo que Christian Rosenkreutz nos describe es la decapitación de la familia real. Los ataúdes son enseguida embarcados en siete navíos, partiendo para una isla lejana. Al llegar a su destino los alojan en curioso edificio de siete pisos: la Torre de Olimpo.
La continuación del relato nos hace asistir a una extraña ascensión de los invitados a través de los siete pisos de la torre. En cada etapa, bajo la dirección de una mujer y de un anciano, participan en operaciones alquímicas. Se procede a una suerte de destilación de los despojos reales de donde se recupera un líquido que pronto de nacimiento a un huevo blanco. De este nace un pájaro que será reducido en cenizas. Con estos residuos, los invitados fabrican dos minúsculas estatuas. Estos homúnculos son alimentados hasta que alcancen la talla de adultos. Una última operación les comunica la flama de vida. Los dos homúnculos no son otros que el rey y la reina que se despiertan de nuevo a la vida. Poco después, estos últimos reciben a sus invitados en la Orden de la Piedra de oro y todos regresan al castillo. Sin embargo, Christian Rosenkreutz , en su primera jornada en el castillo, cometió una indiscreción. Había penetrado en el mausoleo donde yacía Venus adormecida. Esta indiscreción le costara ser condenado a convertirse en el guardián del castillo. La sentencia no parece haber sido ejecutada, pues el relato acaba brutalmente con el regreso de Christian Rosenkreutz a su morada. El autor deja entender que el ermitaño, quien tiene ochenta y un años, solo le quedan algunos años de vida. Este último elemento parece contradecir a la –Fama Fraternitatis- que indica que Christian Rosenkreutx vivió hasta la edad honorable de ciento seis años. Otros puntos del relato nos muestran a un Christian Rosenkreutz muy diferente de aquel que es presentado en los primeros Manifiestos.
Positio Fraternitatis Rosae Crucis (2001)
En Agosto de 2001 la AMORC publicó la Positio Fraternitatis Rosae Crucis, presentado como el “Cuarto Manifiesto”, es decir, como una sucesión natural de los tres citados anteriormente. Contrariamente a estos manifiestos, el contenido de la Positio no es esotérico. Propone ciertas reflexiones y consideraciones de los dirigentes de esta sociedad mística moderna, sobre la sociedad humana tal como se presenta hoy, y sobre la forma en que el ideal rosacruz podría contribuir a esclarecer a la humanidad en el período de crisis profunda de los valores espirituales en los que, según su visión, vive la sociedad actual a nivel mundial. Este documento, termina con una “utopía rosacruz”, en la que según sus propias palabras “si todos los hombres se esfuerzan en creer que es posible y actúan en consecuencia, el mundo será algo mejor…”
Appellatio Fraternitatis Rosae Crucis (2014)
Con el título de Appellatio Fraternitatis Rosae Crucis y coincidiendo con el cuarto centenario de la publicación de la Fama Fraternitatis en 1614, la Antigua y Mística Orden Rosa-Cruz hace público un nuevo Manifiesto bajo los auspicios de la Espiritualidad, el Humanismo y la Ecología.
Los rosacruces más importantes hasta la fecha han sido Lutero, Casanova o Julio Verne.
Página web de AMORC: http://www.amorc.es
Rotary Club
Los negocios no tienen por qué estar reñidos con la amistad. La idea de entrelazar ambas cosas para conseguir más negocios y más amigos fue la que llevó a principios del siglo XX a Paul P. Harris, un abogado norteamericano de Illinois, a fundar los rotarios, un movimiento que aglutina a más de un millón de hombres de 161 países. Para pertenecer al club es imprescindible ser considerado destacado en una actividad profesional y reunirse una vez a la semana en torno a una mesa.
A los rotarios les disgusta que se les defina como un club de ricos o como una colección de apellidos ilustres, aunque todo ello abunda entre los integrantes de este movimiento. La incorporación de un nuevo miembro se produce siempre por invitación de los rotarios ya iniciados. El criterio es que cada actividad profesional o institución esté representada por una única persona, según establecen los estatutos.
Si la persona elegida acepta el ofrecimiento, deberá pronunciar un discurso que verse sobre su negocio o actividad y que los rotarios denominan charla de clasificación. Las tres ocupaciones que pueden contar con más de un miembro en un mismo club son la religiosa, la diplomática y la periodística.
El perfil del rotario medio español podría ser el de un hombre entre los 40 y 55 años de edad, de talante liberal, profesional o directivo de empresa, con un nivel de vida alto y que viaja con frecuencia por cuestiones de trabajo. Entre otros, pertenecen a la organización Luis Coronel de Palma, ex gobernador del Banco de España; Josep Manuel Basáñez, conseller de Economía de la Generalitat; Joan Gaspart, presidente del grupo hotelero HUSA, o el ginecólogo Josep Maria Dexeus. Y si de internacionales hablamos el más famoso rotario es, sin duda, el Papa Francisco.
Barcelona y Madrid son las ciudades españolas en las que los rotarios tienen más implantación, con cinco y cuatro clubes, respectivamente. Desde que en 1922 se fundara en Madrid el primer club, el movimiento rotario ha llegado a los 1.400 miembros. Los 56 clubes españoles pertenecen a dos distritos y el gobernador es la máxima autoridad rotaria que, al igual que los restantes cargos, se elige anualmente. Empieza a ser habitual que en los principales hoteles españoles figure una placa con la rueda dentada de un engranaje, el símbolo del Rotary International. En España hay 5.000 rotarios afiliados.
Los clubes se rigen por un reglamento estricto que, entre otros preceptos, no admitía hasta este año la entrada de mujeres. El número de miembros de un club no puede ser inferior a 20, y para la financiación de sus actividades aporta cada uno de ellos una cuota mensual de unos 100 euros (según delegación); una parte se destina a cubrir los gastos de las comidas semanales, y otra, a la Fundación Rotary, de dudosos negocios, aunque siempre se presentan como supuestos benefactores de la humanidad.
Rotary España: http://www.rotaryspain.org
Martinistas
De todas las Órdenes Masónica Iluministas que florecieron en Francia, durante el siglo XVIII, ninguna tiene influencia comparable a aquella que entró a la historia con el nombre de Martinismo. El surgimiento de esta organización coincidió con la llegada de Joachim Martinez Pasqually.
Martínez Pasqually, pasó su vida enseñando en las logias bajo la forma de un rito masónico elevado, un sistema religioso al cual dio el nombre de Elus Cohen o Sacerdotes Elegidos (Cohen en hebreo significa Sacerdote). Solamente aquellos masones de grado de Elus eran admitidos en los Elus Cohen.
Martínez viajó por varios lugares de Francia, sobre todo por el sur y sudoeste, propagando su doctrina, consiguió adeptos en las logias de Marsella, Avignon, Montpellier, Narbonne, Foix e Touluse. Finalmente, en 1762 se establece en Bordeaux.
En Bourdeaux, Martinez ingresa en la logia La Francesa, que era la única de las cuatro logias simbólicas activas en la ciudad en aquel tiempo. Martinez se empeñó en revivir el entusiasmo de los masones de Bordeaux asegurando la cooperación de varios de ellos, escribiendo para la Gran Logia de Francia en 1763: “Instituí un templo en Bourdeaux para la Gloria del Gran Arquitecto, incluyendo las cinco órdenes perfectas que administro bajo la constitución de Charles Stuart, rey de Escocia, Irlanda e Inglaterra, Gran Maestro de todas las logias regulares esparcidas sobre la superficie de la tierra, y que están hoy bajo la protección de George William, rey de Gran Bretaña, y bajo la Gran Logia denominada…”.
En 1770 el Rito de los Elus Cohens contaba con templos en Bordeaux, Montpellier, Avignon, Foix, Libourne, La Rochelle, Versailles, Metz y París. Otro templo estaba presto a abrirse en Lyon, gracias a los esfuerzos de Willermoz que sería la figura más activa e importante del rito de Martínez Pasqually.
Martínez no dejó un trabajo escrito completo referente a sus enseñanzas, no obstante se encontraron diversos textos incompletos que son parte de sus enseñanzas referidas a un sistema de pensamiento filosófico, esencialmente una Gnosis Cristiana, que se basa en los principios doctrinales del trabajo llamado “El Tratado de la Reintegración de los Seres a sus originales virtudes, poderes y cualidades”.
Este trabajo da una interpretación particular de la Creación, de la Jerarquía de Seres, de la Caída del Hombre y de la manera que tiene el Hombre para recobrar su estado original y restablecer sus privilegios. Martínez de Pasqually considera que el Hombre está en el exilio en esta existencia terrenal privado de todos sus verdaderos poderes. Por consiguiente, el objetivo principal del hombre debe ser trabajar para ser restaurado a la condición original. Esto puede lograrse siguiendo ciertas técnicas .Martinez de Pascualy afirmaba que en cada ser humano había algo divino adormecido y que era preciso revivir. Según Martínez esta centella divina podría ser inflamada al punto de ser liberados del materialismo.
Sobre tales condiciones el hombre es capaz de adquirir poderes, los cuales le permitirán “comunicarse con seres invisibles, llamados por la Iglesia Ángeles y obtener no sólo una santidad personal, sino también la santidad de todos los discípulos de buena voluntad”. Transformar al hombre de esta forma sería regenerarlo y reintegrarlo gradualmente a su estado original; sería capacitarlo a alcanzar aquel estado perfecto que cada individuo y sociedad debería buscar.
Entre los discípulos de Martinez se encontraba el “Filósofo Desconocido”, Louis Claude de Saint-Martin. Este servía como teniente en el Regimiento de Foix cuando oyó hablar de Martinez de Pasqually y del Rito de los Elus Cohen.
Después de retirarse del ejército se dirigió a Bordeaux, donde fue iniciado en los grados de Cohens por Balzac.
Ya en París, se vio obligado formar una especie de grupo, puramente espiritual donde se excluían las ceremonias ritualistas de magia. Hasta la Revolución Francesa, Saint-Martín alternaba entre las orientaciones a sus discípulos y los viajes al exterior donde estableció contacto con la obra de Jacob Boheme.
Saint Martín encontró en los escritos de Jacobo Boheme lo que él buscaba, la Vía Interior o Vía del Corazón. En 1803 muere Saint Martín dejando varios adeptos en diferentes países de Europa. Después de su muerte los discípulos de Saint-Martín esparcieron la doctrina del Filósofo Desconocido en Francia, Alemania, Dinamarca entre otros países.
Fue a través de ellos que en 1880 un ocultista parisino, llamado Dr. Gerard Encause (Papus) tomó conocimiento de la doctrina de Saint-Martín y decidió continuar las enseñanzas. Con ese objetivo, fundó en 1884 una orden mística que llamó Orden Martinista que conserva la línea tradicional que estableciera el Filósofo Desconocido y que llega a nuestros días.
Orden Martinista en España: http://www.ordenmartinistatradicional.es
Históricamente, el apelativo Iluminati es tomado de la congregación “Los Iluminados de Baviera”; que promovía la igualdad de sexos y la educación igualitaria, mientras criticaba el abuso de poder del Estado, la influencia de la Iglesia en todos los estratos de la vida, así como la superstición y prejuicios que éstos dos generaban.
La fundación de esa orden, Los Iluminados de Baviera, data del siglo XVIII, en plena Ilustración, de la mano del profesor de filosofía alemán y jesuita, Adam Weishaupt; quien tenía una gran afinidad por las ideas ilustradas, por lo cual estaba segregado de la comunidad académica del momento, la mayoría dominada por la orden de los jesuitas de la que se separó.
Weishaupt creo la orden como un refugio para todo aquel que quisiera estar enterado de todo el conocimiento no-eclesiástico (o místico, como la alquimia) de esa época y anteriores. Ante todo, subyace el fundamento de todo el pensamiento ilustrado, que pone por delante de si a la racionalidad, el intelecto, como la forma real de llegar a la verdad.
La orden fue tomando forma, hasta conformar la Bund der Illuminaten (Unión de Iluminados). Contrario a lo que se piensa, el grupo original de “Iluminados” no eran parte de los templarios, los rosacruces o la masonería; las cuales les eran contrarias, por su génesis mística.
En los últimos años del siglo XVIII, la orden sufrió varias rupturas; primero entre su fundador, Weishaupt, y su mayor patrocinador, Adolph von Knigge; ya que este último se alejó del plan original: que la organización sirviera como un modelo de mejoramiento del ser humano a través de la razón, en contra del poder absolutista místico y religioso; al permitir que miembros de los altos mando gubernamentales se les unieran, lo que sirvió para que fueran destruidos desde dentro.
En 1785 la orden de los Iluminados fue disuelta y Weishaupt condenado. El príncipe von Gotha lo protegió en su corte. Weishaupt intervino en actos de terror durante la Revolución Francesa. Tuvo que vivir de forma clandestina, amparado por amigos masones; la misma masonería que el propio Weishaupt había denostado.
Como es de suponer, su principal opositor era la iglesia católica, la misma que sostenía al monarca de Baviera; Karl Theodor, quien prohibió todo tipo de organizaciones secretas.
El movimiento Iluminado pregonada todo el pensamiento Ilustrado de igualdad, fraternidad y libertad; pero no como parte de un modelo revolucionario violento, como medio para alcanzar ese estado de beneficio cuasi absoluto, sino como una forma política de lograrlo. De acuerdo con Weishaupt, su modelo presuponía una especie de circulo histórico, en donde las sociedades (y por extensión, el humano) pasan por distintas etapas, en las que se va asentando el despotismo, hasta que éste se convulsiona y da paso a una era de un Estado Beneficio; el mismo que también eclosionaría, repitiendo el ciclo de manera infinita. Para poder llegar al momento de mayor esplendor, las sociedades secretas tenían el deber de educar, llevar y compartir el conocimiento con la humanidad.
Curiosamente, varios de los filósofos ilustrados más reconocidos nunca aceptaron formar parte de ellos, como es el caso de Schiller, Lessig y, sobretodo, Kant.
Una orden Illuminati en la actualidad, está extendida mundialmente desde 1996, especialmente en Latinoamérica. Se trata de la sociedad secreta creada por el español Gabriel López de Rojas en 1995 con 28 años quien ha escrito más de 14 libros sobre sociedades secretas y sus rituales.
Después de sufrir varias denuncias judiciales por amenazas y acusaciones de sectario y estafador, en 2006 decidió renunciar a los Illuminati y denunciar sus conspiraciones por el control del mundo. Según algunos, otra muestra más de su búsqueda de notoriedad, sobretodo dado el éxito de su homónimo italiano Leo Zagami, que está obteniendo mucha popularidad entre los conspiranoicos.
Finalmente, Rojas volvió a sus orígenes religiosos dentro del judaísmo reconociendo su adicción a las sectas y su origen, despertando la imaginación de las conpiranoias antisemitas.
Leo Zagami, fue ex-gran maestre de la orden Illuminati y curiosamente desertó en el mismo año que Gabriel López de Rojas. Y al igual que Rojas no sólo denunció las acciones de los Illuminati sino que se volvió al camino religioso; en el caso de Leo Zagami a la religión musulmana.
Logró gran popularidad, entre los años 2006 y 2008, entre los amigos de la teoría de la conspiración. En la actualidad su credibilidad ha ido decreciendo ya que sus declaraciones de los Illuminati fueron cogiendo finalmente tonos demasiado fantásticos y amarillistas, con afirmaciones que rayan la paranoia.
Página web: http://www.ordeniluminati.net
Golden Dawn
La Golden Dawn, conocida en español como Aurora Dorada o Amanecer Dorado, fue creada por el juez William Wynn Wescott, el médico William Robert Wodman, y Samuel Liddel Mathers. Los tres eran masones y, además, ocupaban altos cargos en la Rosicuciana i Anglia, la SocRos, una organización rosacruz.
Wescott afirmó que había encontrado unos manuscritos que contenían secretos rosacruces, enviados por un supuesto sacerdote en 1887. Y aunque estaban en clave, Wescott logró descifrarlos. Según él se aludía a la orden Goldene Dämmerung, dirigida por la señora Fraülein Sprengel, que a su vez le daría poderes a Wescott para fundar la Golden Dawn británica.
Se creó entonces una estructura de tres órdenes o jerarquías. En el primer orden teníamos a los celadores, teóricos, prácticos y filósofos. El grado cero correspondía al grado de neófito.
En el segundo orden aparecía el adepto menor, el adepto mayor y el adepto exento.
A partir de la tercera jerarquía aparecía en el octavo grado un magister, una especia de grado templario. Y por encima de él el llamado grado Magus. Y por último un décimo grado llamado el Ipssisimus. Se suponía que este tercer grado era para un plano astral, es decir no era de este mundo, por lo que nadie lo había logrado.
En 1891 se creó una segunda orden interna, dentro de la Golden Dawn, llamada Ordo Rosae Rubrae et Aurea Crucis (RR et AC), o sea la Orden de la Rosa del Rubí de la Cruz Dorada. En esta sociedad secretísima o círculo interno en la que se daban determinados secretos.
Aleister Crowley consiguió entrar en la Golden Dawn, convirtiéndose en el nuevo dirigente supremo de Londres. Finalmente fue expulsado de la misma cuando se descubrió su interés por los temas satánicos. Crowley, nacido en 1875, se creía reencarnación de Cagliostro, de Edward Kelley, el ayudante de John Dee y del papa Alejandro VI. Su madre le llamó “bestia 666” y con ese nombre llegaba a presentarse en los ambientes sociales.
Después de su paso por la Golden Dawn, Crowley creó la orden Argentum Astrum (Estrella Plateada), argumentando que había alcanzado el tercer orden de la Golden Dawn, o sea los planos astrales.
En 1912 la Ordo Rempli Orientis (Orden del Templo de Oriente), una sociedad alemana de supuesto origen templario, pensó en Crowley para dirigir la delegación británica, nombrándolo Supremo Rey de Irlanda, Iona y Todos los Británicos en el Santuario de la Gnosis. La OTO tenía rituales iniciáticos relacionados con las prácticas sexuales, lo que complacía a Crowley.
Crowley trabajó para el MI6, el Servicio Secreto inglés. Y finalmente intervino con Ron Hubbard, en la fundación de la Iglesia de la Cienciología.
Hubbard y Crowley estuvieron fecundando a una mujer que, en los ambientes de ambas sociedades se la conocía como “la mujer escarlata”, la cual tenía que dar a luz al anticristo.
La iglesia de la Cienciología todavía hoy en día intenta evitar relacionar a Crowley con su asociación, aunque lo cierto es que Crowley y Hubbard siempre fueron muy buenos amigos.
La cienciología es un conjunto de creencias y enseñanzas, fundado por el escritor de ciencia ficción L. Ronald Hubbard con una filosofía independiente o laica en 1952 y se volvió una religión en el año 1953 con la fundación de la Iglesia de la cienciología en los Estados Unidos. Esta enseña que los humanos son inmortales perdidos en la esencia de su verdadera naturaleza. A pesar de ser reconocida como una religión su estatus legal aún sigue en discusión.
Los cienciólogos creen en un ser supremo, pero no le rinden culto alguno, en cambio creen que solo por medio de la iluminación espiritual completa podrán verdaderamente descubrir y entender al ser supremo en el que creen.
La Iglesia de la Cienciología es la primera religión o gran organización que le prohibió a Wikipedia editar los artículos que contengan información sobre la religión, mientras que en Alemania están tratando de prohibirla.
La Cienciología se basa en una práctica de auditoría, que consisten en sesiones individuales con un consejero de la religión.
En los Estados Unidos, la cienciología y todas sus empresas no pagan impuestos porque está reconocida dentro de las prácticas religiosas del país, así como en Australia.
Antiguos ex miembros han afirmado que la Cienciología aplica una política de desconexión, es decir, si las familias de los fieles no están de acuerdo con practicar la cienciología, estos deberán separarse por completo de sus familiares. La iglesia se ha negado en afirmar esto, pero Haggis lo confirmo en una entrevista para un artículo del New Yorker, en el que confirmaba su ruptura con la iglesia. La iglesia también ha sido conocida como una religión que acosa a los seguidores que abandonan la iglesia, ya que se considera que aquellas personas que entran a la religión y luego deciden abandonarla son unos desequilibrados mentales. Hasta se ha llegado a conocer de casos de personas que abandonan la religión y que son acosados por los seguidores de la misma.
En esta religión, los de rango más alto, conocidos como OT’s, son los únicos con acceso a documentos escritos directamente por su fundador Ron. L. Hubbard. Estos escritos explican la historia de Xenu, el dictador galáctico que tenía como propósito principal destruir todo lo espiritual para causar un daño irreversible, entre otras cosas. De Xenu no se habla mucho, solo aquellos miembros que han aportado grandes contribuciones son los que pueden saber la historia, pero esta narrativa, conocida como ópera espacial y parte importante del folclore de los cienciólogos, fue publicada en 1993 por un ex miembro de la organización el cual tuvo muchos problemas con esta Iglesia.
Como resumen se puede decir que afirman que hace unos 75 millones de año la galaxia estaba formada en una conferencia galáctica y el jefe que gobernaba dicha conferencia era un dictador extraterrestre conocido como Xenu.
Debido al yugo de este dictador millones de seres que eran parte de los planetas que conformaban la conferencia galáctica decidieron escapar, montándose en una nave espacial y despegando desde los supuestos planetas de origen hasta el actual planeta en que residimos.
Pero Xenu los descubrió y los desembarcó alrededor de unos volcanes de la tierra y luego los aniquilo con bombas de hidrógeno. Las almas de estas víctimas se juntaron en un grupo y se pegaron a los cuerpos de los seres vivos que habitaban la tierra.
Cuando entras por primera vez a la Cienciología, te hacen firmar un contrato de dos mil años, en los que se supone tu alma alcanzará la libertad y por fin estarás auto realizado y serás un ser independiente.
Otra característica de esta religión o sociedad secreta es acerca de los pagos que los feligreses deben realizar a la iglesia para poder realizarse la llamada rehabilitación espiritual y las auditorías, estos pagos son llamados comúnmente por la iglesia como “donaciones regulares”. Es por esa razón que la iglesia posee diversos estatus legales en diversas partes del mundo; por ejemplo, en Suiza la cienciología es considerada como una empresa, en Noruega como una organización no gubernamental, en Francia como una secta y en otros países como España y los Estados Unidos es considerada como una religión que se encuentra libre de impuestos.
La sede de la Iglesia de la Cienciología se encuentra en Madrid: http://www.scientology-madrid.es
Skull & Bones
Skull & Bones
En el seno de la muy elitista y puritana Universidad de Yale se juntan cada año quince hijos de muy buenas familias. Estos forman una sociedad secreta de ritos morbosos: los Skull and Bones (calavera y huesos).
La asociación Skull & Bones ha inspirado una importante literatura conspiracionista que responsabiliza a sus miembros con el escándalo Watergate, la invasión de bahía de Cochinos y aun con el asesinato de John F. Kennedy. Gracias a sus conexiones con el mundo de los negocios, sobre todo con el sector bancario, estos antiguos «compañeros de la Universidad de Yale controlarían las finanzas mundiales, y hasta el porvenir del planeta. Los Skull & Bones se habrían infiltrado en el Council on Foreign Relation, la Comisión Trilateral, la CIA, y otras organizaciones.
Los miembros más activos de la organización proceden de un núcleo de unas 20 ó 30 familias, muy interesadas en la defensa de su legado y su linaje. Es por ello que son numerosos los matrimonios entre representantes de las familias a las que pertenecen los miembros de Skull & Bones; aunque únicamente los estudiantes varones eran admitidos, hasta hace poco, en la organización.
A principios del siglo XVIII, el conjunto de universidades estadounidenses, ya sean Harvard, Williams, Bowdoin, Middlebury o incluso Amherst, fueron fundadas por Congregacionalistas. Pero estos se enfrentaban entonces a la competencia de los Presbiterianos, lo que incitó al presidente de Harvard, Increase Mather, a actuar. En 1701, éste deja su puesto y crea una nueva universidad «para que el interés de la Religión sea preservado, y que la Verdad sea transmitida a las generaciones futuras». Con la ayuda de diez pastores, nueve de los cuales venían de Harvard, logra fundar así la Collegiate School of Connecticut.
En 1711, Isaac Newton, Richard Steel y Elihu Yale son contactados para que transfieran a la nueva institución algunos libros de sus colecciones personales.
En 1780, se funda en Yale la rama Alpha de la organización Phi Betta Kappa. Otras sociedades florecen en esa época: La Beethoven Society, el Hexahedron Club… Poco a poco, las tertulias literarias pierden su importancia, reemplazadas por sociedades secretas, más elitistas y cerradas. A mediados del siglo XIX, las tres principales son los Skull and Bones (Calavera y huesos), los Scroll and Key (Pergamino y llave) y Wolf’s Head (Cabeza de lobo).
Paralelamente, el claustro de profesores de Yale decide seguir la tendencia. Seis años después de la creación de Skull & Bones, seis miembros de la elite profesoral del claustro de profesores se reúnen en el «Club», que rápidamente comenzaría a ser llamado el «Old Man’s Club». Entre sus seis miembros fundadores se encuentran los profesores Josiah Willard Gibbs y Theodore Dwight Woolsey. La organización contará pronto en sus filas con William Howard Taft, además dell futuro Jefe de Justicia del Estado de Connecticut Simeon E. Baldwin, el universitario Thomas Bergin, el neurocirujano Harvey Cushing y el fundador de los Skull & Bones, William H. Russell. De estos profesores iniciales, Thomas Bergin y Harvey Cushing no se convertirán en miembros de los Skull & Bones.
Como en todo culto, los miembros deben pasar primero por un rito de iniciación. En S&B, el rito consiste en que el iniciado se coloque dentro de un ataúd, donde deberá masturbarse y contarle a la congregación sus más oscuros secretos sexuales.
Esto puede interpretarse como una forma de “pacto fáustico”, donde el alma del iniciado (encarnada en sus secretos más inconfesables) se vuelve el vínculo mediante el cual queda absolutamente expuesto y vulnerable frente a la hermandad. Los secretos (especialmente los de índole sexual) conforman la parte más propia, más intransferible del propio ser; al revelar esos secretos, simbólicamente, el iniciado se sacrifica a sí mismo en una inmolación verbal/sexual, se ofrece como ofrenda, se vacía.
Pero ese vacío se llena rápidamente con la señal de aceptación de Skull & Bones: cada iniciado recibirá, al terminar su ceremonia de iniciación, $15 mil dólares, libres de impuestos.
Página web: http://www.skullandbones.org
Teósofos
A finales del siglo XIX van a surgir en el mundo occidental una serie de grupos de signo ocultista que dejarán la clandestinidad y que tendrán una gran influencia en la vida y la política de la sociedad.
Teósofos
A finales del siglo XIX van a surgir en el mundo occidental una serie de grupos de signo ocultista que dejarán la clandestinidad y que tendrán una gran influencia en la vida y la política de la sociedad.
Helena Petrovna Blavatsky (1831-1891) será una de las principales figuras en esta corriente esotérica. Aristócrata rusa de origen germano, sus extravagantes ideas inspirarán la doctrina Teosófica que tanta influencia tendrá en la élite cultural del NSDAP (Partido Nacional Socialista de los Trabajadores Alemanes).
Muchos jerarcas del régimen hitleriano eran teósofos confesos. Esta corriente sería la base e inspiración en el siglo XX del movimiento de la “Nueva Era”.
Helena desde muy pequeña se mostró interesada en el esoterismo, leyendo algunas obras de la biblioteca personal de su bisabuelo que había sido iniciado en la masonería a finales del siglo XVIII. En su casa natal llegó a tener experiencias en estado de trance con lo que ella llamaba “espíritus”.
A los 16 años, y para ganar una apuesta, sedujo a un general del ejército de más de 40 años llamado Nikifor Blavatsky de quien tomaría el apellido. El objetivo de Helena con esta boda era conseguir la independencia de sus padres, pero nunca consumó su unión marital debido a que ella tenía una anomalía sexual en el útero que la impedía mantener relaciones con un hombre. A los tres meses huyó a caballo para refugiarse en casa de su abuelo Tiflis. Durante varios años afirma que viaja por Egipto, Turquía, Grecia, México, India, Inglaterra, Canadá y EE.UU, donde contactó con diversas personas ligadas al esoterismo y la masonería. Llegó a a afirmar que había estudiado por espacio de siete años con los mahatmas (maestros) de la India.
En 1875 emigra a los Estados Unidos causando un gran revuelo con su supuesta habilidad para realizar levitaciones y mover mesas y otros objetos. En Nueva York fundará junto con el coronel Henry Olcott y el abogado William Quan la Sociedad Teosófica. Su ideología pronto se difundió en todos los EE.UU., Inglaterra, Alemania y la India, país al que viajó y donde estableció en 1879 la sede de su organización. De ser una médium pasó a afirmar que durante sus viajes al Tibet había entrado en contacto con espíritus que guiaban su vida mediante mensajes y cartas. En la India permanecería hasta 1885 con el fin de dotar a sus teorías de un marcado orientalismo. Allí conocerá a Alfred Percy Sinnett, editor del periódico oficial del Gobierno de la India “The Pionner”, contacto que sería muy importante para Blavatsky y la Sociedad Teosófica.
En 1887 funda la revista “Lucifer” donde se hablaba del advenimiento del Anticristo para instaurar un Nuevo Orden Mundial. En 1891 muere sola en Londres abandonada de todos sus adeptos.
En su estancia en la India escribió “Isis sin velo”, donde describe los pormenores de una religión de su propia invención. Al igual que otros creadores de religiones, como Joseph Smith, fundador de los mormones, su obra se compone de gran cantidad de plagios de religiones paganas, gnosis, creencias esotéricas y espiritistas, a las que Blavatsky atribuirá un carácter sobrenatural. En este libro describe el desarrollo de las ciencias ocultas, la naturaleza y el origen de la magia y las raíces del cristianismo.
No obstante su obra principal será La doctrina secreta (1888), libro que será la base de la New Age y que está repleta de teorías relacionadas más o menos indirectamente con el hinduismo. La obra tiene un carácter marcadamente antisemítico y anticristiano. En ella llegará a afirmar que el verdadero dios era Satanás (Baal) auténtico benefactor de la humanidad, y que el dios del Antiguo Testamento, conocido por Jehová no era otro que Caín, el primer asesino.
Blavatsky sostenía haber recibido una revelación sobre la existencia de una antiquísima civilización que habría florecido en lo que hoy es el desierto de Gobi, pero que lo habría tenido que abandonar para vivir en misteriosos reinos subterráneos.
En esta voluminosa obra de pesada lectura, describe la evolución humana como una caída desde el estado de gracia divina inicial al materialismo actual. Este proceso evolutivo se realizaría en siete épocas, de las cuales cinco ya habrían sucedió, mientras que las otras dos estarían por llegar. En cada una de estas épocas el ser humano progresaría en una serie de razas, siendo una de ellas la dominante, base de las razas de la siguiente época.
En la primera época, denominada polar, se iniciaría la evolución humana. La tierra permanecería en estado ígneo mientras que la atmósfera era gaseosa. De estas sustancias, los Señores de la forma construirían el primer hombre de cuerpo mineral. En la época hiperbórea el hombre pasaría por el estado vegetal, pues tenía entonces un cuerpo denso y uno vital y una consciencia semejante a la del sueño. En aquel entonces el hombre era bisexual y hermafrodita. La tercera época es la lemúrica. En ella unos arcángeles o “Señores de la mente” ayudarían al nacimiento de la individualidad. La fuerza sexual construiría el cerebro para la expresión del pensamiento. Los negros y las razas salvajes de pelo duro se formarían en esta época.
En la cuarta época o Atlante se desarrollarían las siete razas en las que se dividirá el género humano. Todas ellas habitarían un supuesto continente, hoy desaparecido, denominado la Atlántida. Las seis primeras serían los Rmoahals, los Tlavatls, los Toltecas, los Turanios, los Acadios y los Mongoles. Para Blavatsky estas razas habrían mantenido relaciones promiscuas con animales dando origen a los atlantes, una especie de monos gigantes sin sentido en el plano intelectual. La séptima raza la formarían los arios quienes se mantendrían puros y por inspiración divina llegarían a dominar el mundo en oposición a cristianos y judíos.
Cada una de las seis razas inferiores evolucionaría mediante mutaciones naturales. La raza aria, en cambio, se transformaría en superhombres por un salto repentino destinado a dotarlos de las facultades necesarias para vivir en un mundo post-diluviano.
Los arios perdieron sus poderes mágicos sobre las fuerzas de la naturaleza y el desarrollo psíquico, en cambio adquirieron facultades de desarrollo cerebral y una “inteligencia superior” a la de las otras razas sobrevivientes descritas como inferiores en cuanto a sus pobres facultades intelectuales y a su herencia genética claramente defectuosa.
En la quinta época denominada Aria, el hombre conocería el uso del fuego y de otras fuerzas, cuyo origen divino se le ocultó intencionalmente a fin de que pudiera emplearlo libremente.
Al igual que en la época anterior, Blavatsky hablará de siete grandes razas que se sucederán en el tiempo y que iniciados en las “artes superiores” darían origen a lo más excelente de las civilizaciones. La primera sería la Aria, continuadora de lo mejor de la época anterior y que daría origen a la civilización India. La seguirían en orden la Babilónico-Asirio-Caldea, la Persa-Greco-Latina, la céltica y la Teutónico-Anglosajona. Faltarían dos razas que estarían por venir en un próximo futuro. En concreto la sexta raza se generaría cuando la precesión de los equinoccios entró para el año 2000 en el signo de Acuario. Solo entonces surgiría el Homo noeticus, u hombre del conocimiento. El resto de las razas deberían de desaparecer en una lucha biológico-cósmica, ya que como dice Blavatsky: “la extinción de las razas inferiores es una necesidad kármica”.
Más información en su web: http://www.sociedadteosofica.es
En este listado no he incluido para nada las actuales órdenes de caballería que siguen existiendo: orden de Malta, Caballeros del Santo Sepulcro de Jerusalén, orden Alemana, orden del Toisón de Oro, orden de la Jarretera inglesa, o la orden Militar de Cristo, entre otras, por considerarlas de caballería, no sociedades discretas o secretas como tales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario